jueves, 26 de septiembre de 2013

¿Diálogos de un Plantón?

Sentados en una mesa dos sabios griegos llamados Jenófanes y Parménides acompañados de una solitaria lámpara de aceite que alumbra la silenciosa oscuridad, dialogan sobre Cipriani un cardenal religioso de un país llamado Perú.

Jenófanes: ¿Qué piensas sobre las opiniones de este personaje religioso llamado Cipriani?

Parménides: Me pregunto de dónde obtiene aquella autoridad para cuestionar la forma como un pueblo quiere usar su libertad, cuando el pueblo no ejerció su libertad para elegirlo a él.

Jenófanes: Mi amigo, la autoridad de Cipriani no funciona bajo los principios de la democracia como en nuestra querida Grecia, aquí la autoridad religiosa no la elige el pueblo. La gente no decide en asuntos de fe. El poder  de Cipriani es por  tradición y costumbre, la libertad y la razón no cuentan.

Parménides: Debo entonces suponer que aquella tradición, hace que Cipriani considere que es el único con el poder  y la capacidad de hablar, de sentirse un vocero  oficial del Dios Católico. Entonces si Cipriani no es la voz de Dios, y solo representa la tradición, pues sin costumbre y tradición no tendría poder, ¿Dónde está la auténtica voz de Dios?

Jenófanes: Los católicos dicen, que su Dios vive entre los humildes, los pobres y los que sufren.

Parménides: Según eso, pienso que los homosexuales han sufrido, sufren ahora y tal vez sigan sufriendo. Si el Dios de los católicos está entre los que sufren. ¿Quizá si escuchamos atentamente a los homosexuales encontremos allí la voz de ese Dios?

Jenófanes: Indudablemente pensar eso es más razonable, que pensar que la voz de Cipriani es la voz de Dios.

Parménides: Si se ve tan sencillo alcanzar esta verdad ¿Porque los católicos no lo ven de ese modo?

Jenófanes: Son cosas que ignoro mi querido amigo, pero así como el dinero mal empleado afecta los sentidos de las personas volviéndolas mudas, sordas y ciegas; una fe que no reflexiona y no se critica así misma ocasiona lo mismo.

Parménides: Se me ocurre que los llamados conquistadores enseñaron a este pueblo a creer en la creencia de un Dios, pero quizá lo esencial era enseñarles a buscarlo en todas las cosas, alcanzarlo con el uso de su inteligencia.

Jenófanes: Es posible. Pero finalmente, ¿Qué piensas ahora de Cipriani?

Parménides: Creo que es fácil suponer que se es la única luz  en un lugar donde reina la oscuridad de la razón.

Jenófanes: Tanto como esta pequeña lámpara cree ser el sol en este cuarto sumergido en la penumbra.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

CONECTATE

Mi Objetivo:

1) Brindarte con un estilo muy personal la interpretación sobre la pregunta que te haces: ¿Qué es la Sociología?, y para eso haré un recorrido casi biográfico de esta ciencia.